El Parlamento italiano ha dado hoy un paso significativo para penalizar la práctica de la maternidad subrogada en el extranjero. La Comisión de Justicia de la Cámara de los Diputados aprobó una serie de enmiendas a un proyecto de ley propuesto por la coalición de derecha que gobierna el país desde octubre pasado.
El proyecto de ley, presentado por el Gobierno liderado por Giorgia Meloni, busca convertir la maternidad subrogada en un “delito universal”. En Italia, esta práctica ya es considerada un delito desde 2004, castigando con penas de cárcel de hasta dos años y multas de hasta un millón de euros a aquellos que estén involucrados en la comercialización de gametos o embriones.
Sin embargo, el nuevo proyecto de ley busca extender esta penalización a los ciudadanos italianos que recurran a la maternidad subrogada en el extranjero.
La enmienda aprobada hoy prohíbe a los ciudadanos italianos hacer uso de los “vientres de alquiler” en el extranjero, con el objetivo de obstaculizar cualquier práctica que pueda ser considerada como tráfico comercial de niños.
Esta aprobación en la Comisión de Justicia marca el primer paso parlamentario para el proyecto de ley de Meloni. Se espera que llegue al pleno de la Cámara de los Diputados el próximo 19 de junio y luego sea enviado al Senado para su aprobación definitiva, que se considera probable debido a la mayoría de la derecha en ambas cámaras.
Sin embargo, los partidos de oposición, como el Partido Demócrata y el Movimiento 5 Estrellas, han votado en contra de este proyecto de ley. Argumentan que es contrario a la Constitución y no tiene en cuenta los derechos de los niños, entre otras justificaciones.
Información: El Comercio
